Una vez llegado al hotel, el recepcionista nos atendió con una actitud tan cansina, no sabía cómo hacer ningún tipo de trámite con respecto a la reserva, vacilón y pedante, la habitación olía a humedad, las camas más duras que las de los picapiedras, ningún tipo de insonorización en las en las paredes podía escuchar prácticamente a la gente respirar, el baño con olor feo todo el tiemp, encima LLENO DE CUCARACHAS! 0 HIGIENE! El supuesto microondas para poder usar estaba en un estado lamentable, parecía recuperado de una catástrofe medioambiental, el aire acondicionado funcionaba mal, la tele sin señal, en general un servicio nefasto y súper caro para la bazofia de lugar que es. No recomiendo ir