El hotel estaba en renovación, no tenía la alberca abierta y había trabajadores por todo el hotel. Un día no pasaron a limpiar la habitación a pesar de que lo pedimos 3 veces, el día siguiente pasaron hasta las 4 de la tarde a pesar de que fuimos a recepción VARIAS veces ya muy enojados. No hay toallas para ir al mar, regresas lleno de arena y no hay donde enjuagarte. En toda la estancia no tuvimos internet, llevamos un ROKU de casa para entretener a los niños y jamas tuvo señal para poder conectarse. La televisión de pésima calidad y solo un canal de niños. Eramos 4 personas y a pesar de que les pedimos MUCHAS veces 4 juegos de toallas, siempre nos dejaban 3. Carísimo para estar en un lugar sucio, sin alberca y sin internet.