He viajado a Bangkok en 18 ocasiones. Habitualmente me alojaba en Silom Road, en un hotel que hoy esta en nueva construcción. Para esta nueva visita me decidí por FURAMA Silom que esta en la misma calle y fue una gran decepción. La suciedad es patente en todas partes, cortinas del baño podridas, cristales sin limpiar en años, sábanas rotas, caja fuerte sin anclar a la pared y muchos detalles mas. Ni un solo día conseguí que arreglaran mi habitación antes de las 6 de la tarde. El desayuno es limitado pero aceptable, no obstante la suciedad también se manifiesta en la tapicería de los asientos con manchas pegajosas de comida derramada. El colmo es la falta de empatía del personal de dicho comedor, en concreto de la responsable, que al pedirle yo que repusieran huevos fritos (solo quedaban dos y rotos) me dijo que cogiera los que quedaban y entonces repondría. Pero el problema mayor son las cucarachas. He viajado mucho por Asia y se que es normal por el clima, encontrar cucarachas en la habitación alguna vez y que los hoteles hacen desinfecciones periódicas para evitarlas, pero nunca vi tantas en mi habitación, ejemplo claro de que FURAMA Silom no hace un correcto mantenimiento. En conclusión debo decir que este hotel tiene dos cosas buenas, su ubicación y que la cama es muy cómoda, por todo lo demás es en mi opinión absolutamente "NO RECOMENDABLE"